PUNTO Y COMA

Punto y Coma

Feliz Día del Niño
20 millones de menores en la pobreza
Rezago en la protección infantil

Por Luis González Romero

De acuerdo a las estadísticas más recientes revelan que en el país existen por lo menos 20 millones de niños que subsisten en condición de pobreza, indicándose que en el sur-sureste del país, es la región con los mayores rezagos; 3.3 millones de niños que no asisten a la escuela y se desconoce el número de menores que carecen de registro oficial, según una advertencia de la UNICEF.

En muchos de los casos, sobre todo desde el punto de los políticos, las cifras se maquillan, y con celebraciones del Día del Niño creen que se resuelve el problema regalando un juguete barato, una pelota, una bolsa con dulces y en algunos casos rifando bicicletas; lo cual si bien es cierto que es motivo de alegría, de sonrisas inocentes, la verdad es algo efímero, porque con ello no desaparece la pobreza en los hogares de millones de menores de edad y, lo peor del caso es que esos actos tienen tintes y negras intenciones electoreras.

“El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), alertó que en México persisten importantes rezagos en atención y protección a la población infantil y que al menos 20 millones de niños subsisten en condición de pobreza”.

Datos del Consejo Nacional de Evaluación (Coneval) revelan que la población de 0 a 17 años que se encuentra en situación de pobreza es de 20.8 millones, de los cuales 5.1 millones están en pobreza extrema, lo que significa que 44 por ciento de los 47.2 millones de mexicanos que el gobierno federal ubica en los estratos de mayores carencias, son niños.

“La representante de UNICEF, Susana Sottoli, dijo que 3.3 millones de niños no asisten a la escuela y que se desconoce el número de menores que carecen de registro oficial, incluyendo acta de nacimiento, y que forman un “sector invisible de la población”.

El perfil de los niños que no asisten a la escuela, dijo, coincide con las mismas características que en el caso de la mortalidad infantil, es decir: comunidades indígenas, de familias que viven en situaciones de pobreza “y que están situados con muchas más probabilidades en el sur-sureste del país”.

Los datos que revela la UNICEF, como organismo defensor de la infancia, son creíbles; pero puedo estar seguro que las cifras reveladas van más allá de eso; pues basta internarse en los municipios de la sierra, de cualquier región del país para constatar la extrema pobreza que existe y la gran cantidad de carencias que hay en cada hogar; sumado a los vicios de alcohol, drogas, desintegración familiar, enfermedades y la falta de recursos y hasta de voluntad para que los niños reciban a lo que tienen derecho.

Dijo que en la ONU “nos urge saber cuántos niños y niñas no existen en México, porque al no tener un acta de nacimiento no existen”.

La UNICEF pondera el hecho de que en el país coexisten situaciones de grave desnutrición con crecientes índices de sobrepeso y obesidad en niños. “Se tienen las dos situaciones coexistiendo en el país y eso es un desafío importante para la política pública.”

Ayer fue Día del Niño y en las escuelas hubo festejos y además les dieron la noticia de que regresarán a las aulas hasta el próximo jueves, que disfrutarán de un “puentazo” muy mexicano, que para los niños es lo mejor de la escuela, -estar de vacaciones- y felicidades niños, todos los que tienen el privilegio de asistir a la escuela; pero que decir de lo que no van a la escuela, de los que andan descalzos, con ropa relabada y con una pésima alimentación, lo que se refleja en problemas de desnutrición y sus consecuencias.

Los niños pobres y en pobreza extrema no solamente están en las comunidades rurales, apartadas, indígenas; no señores, también por miles y por millones en los cinturones de miseria que existen en las grandes y medias urbes, en donde hay sectores extremadamente vulnerables…..Por Hoy es todo, soy Luis González Romero, mi correo electrónico: notiluis@hotmail.com, hasta pronto y respetemos los derechos de los niños dándoles lo que necesitan, aparte de los regalos simples en el Día del Niño, con lo cual solamente se logra ver una sonrisa, que en ocasiones se traduce o interpreta como un gesto de tristeza y resignación.