DIF CREA CONCIENCIA SOBRE LAS
CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS
Poza Rica, Ver.- Ante maestras, promotoras, amas de casa y público en general se abordaron 2 charlas en el auditorio de la CANACO, ofreciendo a los asistentes información sobre las consecuencias de tener una ingesta baja en nutrientes.
La primera de ellas se tituló “Aspectos psicológicos que influyen en la mala nutrición y obesidad”, impartida por la Lic. en psicología Ana María Ancira Abundis, quien abordó aspectos importantes como depresión, baja autoestima, emociones; relacionando estos con el apetito, la cantidad y calidad de lo que se consume.
La baja autoestima que eleva el riesgo de desarrollar exceso o disminución de peso. Estadísticas muestran que los niños que tenían baja autoestima, sentían que tenían menos control sobre sus vidas o se preocupaban más a menudo, tenían más probabilidades de aumentar de peso en los siguientes 20 años.
Los niños que sufren desde su gestación una mala alimentación son más susceptibles a los problemas psicológicos y emocionales y son más propensos a sufrir enfermedades de adultos, y entre ellas, figura la obesidad, la diabetes e hipertensión arterial.
La bulimia y anorexia son padecimientos que se mencionó afectan principalmente a los adolescentes por cuestión de imagen, distorsionando la visión real de sí mismos, haciéndolos ver obesos, alimentando pensamientos negativos que los hacen caer fácilmente en cuadros depresivos.
Se comentó que en una mala alimentación influyen factores como la publicidad en televisión, Internet, etc. así como la influencia de las amistades, colegio, clubes sociales, incluso de familiares que presionan o discriminan a personas con sobrepeso.
Para finalizar recomendó para tratar y controlar la depresión, la baja autoestima, la obesidad y las emociones negativas; contar con una terapia psicológica, una farmacológica que puede o no ser necesaria, y una terapia nutricional que colabore en el aprendizaje acerca de la alimentación.
Así mismo se contó con la participación de la Dra. Yolanda Cazares Anaya, coordinadora de asistencia social de la Unidad Básica de Rehabilitación del DIF quien de manera clara y detallada expuso cada uno de los padecimientos o consecuencias de una alimentación inadecuada, desde el inicio de la vida hasta llegar a una edad adulta, así como los síntomas que presentan pacientes con diabetes e hipertensión.
La Dra. Cazares hizo hincapié en el tema del día mundial de la alimentación que es procurar una buena alimentación en tiempos de crisis, asegurando que puede haber frutas y verduras de temporada que pueden ser económicas para elaborar comidas más nutritivas.
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