12/12/08…..lupita
DERROCHE FE PARA LA GUADALUPANA
Miles le rindieron pleitesía durante 12 días
Por Luis González Romero
Poza Rica, Ver.- En todo México y muchos países latinos se rindió veneración a Santa María de Guadalupe, cuya aparición sucedió hace más de 500 años en el Cerro del Tepeyac, siendo el indio Juan Diego (ahora Santo) el conductor del mensaje, con el Milagro de las Rosas.
A la Basílica del Guadalupe, en la ciudad de México, arribaron más de 6 millones de peregrinos entre el 1 al 12 de diciembre; pero en todas partes de le venera, se le rinde tributo, se le agradece por los milagros concedidos y en Poza Rica tiene su santuario en la calle 18 de Marzo, en la colonia Manuel Avila Camacho hasta donde llegan miles y miles de peregrinos.
Así como El Cura Miguel Hidalgo, en 1810 tomó la bandera de México y un estandarte con la imagen de la Virgen de Guadalupe para enarbolar la lucha por la Independencia; así ahora hay quienes realizan sus peregrinaciones y hasta las politizan, para medir fuerzas partidistas y de simpatía.
Pero en todas partes, donde existe una iglesia Guadalupana, como en Tlapacoyan, Martínez de la Torre, Potrero Nuevo; donde quiera que haya una imagen de la virgen morena, llegan sus devotos para darles las gracias, para recibir sus bendiciones, para cantarles las mañanitas y las alabanzas alusivas a ella.
A la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, ubicada en la colonia Obras Sociales, llegaron miles de personas para venerar a la Guadalupana y ahí escuchamos al Padre Juan Jaime Suárez Silva, que manifestó “que si queremos ser fieles a Guadalupe tenemos que priorizar el evangelio y la catequesis, porque la noble señora del cielo nos enseñó a evangelizar; pero a nosotros se nos ha olvidado esa enseñanza”.
Pero Santa María de Guadalupe derrama sus menciones para todos los que creen en ella, para todos los hombres y las mujeres, no solamente de los que acuden para recibir el agua bendita; sino para todos aquellos comerciantes que realizan sus ventas en ésta temporada.
Como los que elaboran las coronas, los que hacen los arreglos para la imágenes que llevan los peregrinos, los que venden cirios, veladoras, ropa para niñas y niños, los sombreros, las canastas, los collares, los que venden comida, aguas, dulces, juguetes, fotógrafos, transportistas, en fin, un mundo de gentes que reciben las bendiciones de la Lupita a través de las actividad que realizan y que no se sientan a esperar que cosas les caigan del cielo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario