Punto y Coma
Feliz Navidad a todos
Que el año que viene sea mejor
Sigan leyendo Diario de Poza Rica
Por Luis González Romero
Cuando era pequeño, cuando aun no alcanzaba a comprender mucho de los que mis mayores platicaban, recuerdo que se hacían comentarios en el sentido de que el siguiente año sería más difícil por la carestía, por el bajo precio de los productos del campo y porque los ricos cada día eran más ricos y los pobres más pobres; creo que nada ha cambiado.
Eran diálogos de lamentaciones entre campesinos, comerciantes, obreros, quienes decían “que ningún dinero alcanza, todo está más caro, que ahora vamos a comer puros frijoles, no ya no da para zapatos, que mejor los niños no vayan a la escuela porque los cuadernos están muy caros”, en fin es algo de lo que recuerdo y se me quedó pegado eso de la carestía y de que cada día la vida es más cara, creo que nada ha cambiado.
Ha transcurrido el tiempo y cada año se escuchan las mismas lamentaciones, se repiten las palabras, incluso como las “feliz navidad, venturoso año nuevo, que haya salud, dinero y amor”, como buenos deseos de quien o quienes una vez al año expresan esas palabras” que hasta cierto punto parecieran sinceras; cuando la verdad es que solo se trata de “cumplidos” que no encierran un verdadero sentimiento fraterno o de familiares, salvo sus excepciones
Es algo así como un 10 de Mayo, cuando los hijos y los nietos llenan de abrazos, besos y felicitaciones la mujer madre por ser su día, motivo por el cual se le visita y hasta se le llevan regalos; pero esa mujer tiene que rajarse la madre desde muy temprano, porque sabe que llegará la prole y algo le tiene que ofrecerles, desde una comida hasta bebidas, que no se elaboran solas ni con una varita mágica.
Al final del día o parte de la noche, aquella mujer madre se queda a seguir trabajando, para lavar los platos, las cazuelas, las sartenes y para poner en orden todo el desorden que dejaron los visitantes que la felicitaron por ser su día, por lo tanto en lugar de tener un día tranquilo, descansando como debiera, concluye una jornada intensamente agotadora; pero finalmente da gracias a Dios por la visita de los hijos.
Pregunto…¿Por qué esperar la navidad, el año nuevo, el cumpleaños, fecha o motivos para decir felicidades?...cuando lo podemos decir todos los días, a todas horas; como también podemos decir gracias Dios, cualquiera que sea la idea que tengan de él, gracias por permitirme estar escribiendo en estos momentos, gracias por los que me están leyendo, por los que escuchan, gracias a Dios por loque vez; gracias por estar sano, por tener trabajo, por caminar, gracias por ver, por hablar, por comunicarme contigo; muchas gracias a todos; gracias a Dios por estar rodeado de tanta gente bonita, generosa, trabajadora, estudiosa, creativa; gracias Dios porque me permites comunicarme desde aquí y por estos medios que me permiten tener un enlace, una comunicación contigo; gracias por interactuar con todos ustedes, gracias por el maravilloso día de hoy, porque el de mañana es un misterio y el de ayer ya es historia.
Les digo gracias, muchas gracias por todo y felicidades ahora siempre, a todas horas y todos los días, porque ustedes deben ser felices siempre y ante la adversidad también, porque ella es un reto de Dios para que demuestres que eres capaz de superar los obstáculo y de salir siempre adelante. No claudiques jamás….Por hoy es todo, soy Luis González Romero, mi correo electrónico: notiluis@hotmail.com, hasta pronto y pásenla bien.
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