MITOS Y OTROS CUENTOS

MITOS Y OTROS CUENTOS
Por: LIC. JESÚS ARAUJO LÓPEZ
EL IMPERIO DE LA LEY

En estos días de grave realidad para nuestro país, surge un sentimiento de preocupación e impotencia que hace que nos preguntemos ¿cómo llegamos hasta esta situación?, la verdad es una pregunta difícil de responder porque este problema ha sido provocado por todos, Gobierno y ciudadanos, todos provocamos este problema, pero todos somos parte de la solución.
Si amigos, cada vez que hacemos algo con lo que transgredimos las leyes, los convencionalismos sociales, estamos contribuyendo al deterior de nuestra sociedad porque actuamos contra ese pacto social que nos cohesiona, con el que se mantiene la paz y la tranquilidad social, con un estado de derecho para todos y así llegar a el imperio de la ley.
A pesar que no haber una definición formal de imperio de la ley, podemos decir que es semejante al de rule of law, estado de derecho, etc. Por el que entendemos que la ley está sobre cualquier otro principio gubernativo y que en un Estado tanto el gobierno como sus funcionarios están sujetos a la ley, sin olvidar que también los ciudadanos estamos sometidos a los principios de derecho.
El Imperio de la ley ha sido descrito como un principio meta jurídico o un ideal ético político. De acuerdo a Laporta: “La vieja aspiración histórica a establecer un «gobierno de leyes»... dio lugar en la cultura jurídica europea al ideal de imperio de la ley o rule of law, que es quizá la piedra angular en que se sustenta la legitimidad de nuestros ordenamientos jurídicos vigentes.”
Así pues, por principio de cuentas es la autoridad y sus funcionarios quienes deben ceñir sus actuaciones al principio de que la autoridad debe actuar con apego a la legalidad cosa muy distante de los hechos del michoacanazo, la guardería ABC, el caso Greg Sánchez, etc. En los cuales quedó demostrado que la autoridad actuó de manera facciosa llegando incluso al ridículo y al descrédito, eliminando así el estado de derecho que debe prevalecer.
Las ladies de Polanco, tremendo caso en que un par de ciudadanas avasallan a los representantes de la autoridad con una sarta de improperios que harían enrojecer de vergüenza las bocas más groseras, y esa actitud que nos deja boquiabiertos al desafiar incluso a los golpes los elementos de seguridad, si todos hiciéramos eso mismo acabaríamos con el estado de derecho.
Hablar de lo ocurrido en Monterrey donde fallecieron 52 personas al haber sido incendiado un casino es cosa aparte, ante la actuación tan rápida como actuaron los delincuentes nada podía hacer la autoridad, sin embargo vemos con optimismo que de manera eficiente se han detenido a varias personas supuestamente involucradas en los hechos, quisiéramos que así se actuara siempre, en cada caso, ante cada situación, porque siempre que alguien transgrede la ley causa un daño a nuestra sociedad.
Juntos Gobierno y sociedad podemos cambiar esta situación, hagamos cada quien lo que debemos hacer sin pretender más de lo que en derecho nos corresponda, sin hacer lo que no nos gustaría que nos hicieran y siempre apegados a la rectitud de nuestras leyes, de esta manera contribuiremos a que el estado de derecho sea una realidad, contribuiremos a que en nuestro país se encuentre firmemente establecido el imperio de la ley y no sea solamente un mito y otro cuento.