EN RIESGO EL 80% DE LA COLONIA NUEVA ESPERANZA

El riesgo el 80% de la colonia Nueva Esperanza

Autoridades municipales avalan el asentamiento irregular

Por Luis González Romero

Poza Rica, Ver.- El 80 por ciento de los 120 lotes que conforman el asentamiento humano denominado colonia Nueva Esperanza, en la margen derecha del río Cazones, atrás de las colonias Morelos y Granjas, están ubicados en zona de alto riesgo; sin embargo las autoridades municipales están solamente esa irregularidad y creando un problema más, sobre todo cuando llegan las lluvias, que será la temporada en que tengan que evacuar a los habitantes de esa colonia.

Lo anterior fue expresado por un profesionista que conoce el lugar, que sabe perfectamente el problema que representa por la cercanía con el río Cazones y además de que dentro de la perimetral de esa naciente colonia, se encuentran dos pozos de Petróleos Mexicanos, ductos y otras instalaciones de la paraestatal que representan un riesgo permanente para las familias asentadas en ese lugar.

En relación a este caso, en el que tiene metidas las manos y hasta las botas el síndico Efraín Ortega Márquez, quien los está protegiendo y hasta prestando la maquinaria para hacer la apertura de las calles, aunque en realidad en esa nueva colonia solamente viven entre 12 a 15 familias.

En total son 120 lotes, mismos que en un 80 por ciento ya se inundaron recientemente, solamente que como no están ocupados, no hay afectaciones; pero cuando la colonia esté poblada al 100 por ciento, será una bomba de tiempo, por un lado por el desbordamiento del Cazones y por otra parte por las instalaciones de Petróleos Mexicanos que pueden generar desgracias personales y del medio ambiente.

Cuando se han hecho manifestaciones en el palacio municipal, acuden un promedio de 70 personas, pero éstas son acarreadas, porque detrás de todo ello existen los más oscuros intereses de integrantes del ayuntamiento, pues quienes llegar para inconformarse, son comerciantes, obreros, profesionistas y muchos de ellos procedentes de diversos lugares de la región y hasta del estado de México.

En todo esto están intereses personales del síndico del ayuntamiento y seguramente hasta del mismo alcalde Marco Alarcón Trueba; pero sobre todo del primero de los mencionados, a quien casi a diario lo visitan los pocos habitantes de la Nueva Esperanza.