jueves, 16 de febrero de 2012

PUNTO Y COMA

Punto y coma

Cuatro años para meter mano al cajón,
Aumentará número de ediles fugitivos,
Tres años no eran suficientes.

Por Luis González Romero

Los próximos ayuntamientos será de cuatro años, de acuerdo a lo publicado el lunes 9 de enero del 2012 en el número extraordinario 10, la Gaceta Oficial del gobierno de Veracruz, en donde se dio a conocer el decreto número 542 anunciando al país que a partir del primero de enero de 2012 los alcaldes ‘’durarán en su encargo cuatro años’’, es decir, los alcaldes que se elijan el año próximo, a los que se les concede de manera constitucionalmente un año más para que tengan tiempo suficiente para meter la mano al cajón de los billetes, y si en la actualidad hay varios alcaldes sustraídos a la acción de la justicia o protegidos por sus partidos, imágines lo que pasará cuando terminen el periodo de los cuatro años.

Para “taparle el ojo al macho”, en tiempos pasados, en algunos casos y para que los vecinos pongan sus barbas a remojar, se han ejercido algunas acciones de encarcelamiento de ediles, como sucedió en Tuxpan en el trienio del alcalde Jaime Zapata Vázquez, del síndico Rubén Cruz Sagastume y Margarito, el tesorero, tres que fueron procesados y enviados al recluso por el delito d especulado. Nada raro, solamente hicieron lo que hacen todos, gastarse el dinero del pueblo; pero era necesario hacer escándalo para que los demás lo meditaran y recapacitaran un poco, es decir, que no metieran toda la mano al cajón, nada más la “uñita” y algo parecido sucedió en Tihuatlán, con Francisco Ortiz Yorio (el popular Panchito), que gobernó durante tres años y que para rubricar su gestión fue enviado a la cárcel.

Recientemente hubo aplanadora priista en el Congreso del Estado y con sufragios del PRD, el Partido Verde y el Panal, en tanto los diputado panistas se opusieron, pues bastaría recordar las lecciones en la cuenta pública de los años 2004 a 2010, donde decenas, cientos de ediles desviaron recursos, y de los más de 300 ex alcaldes pillos y ladrones sólo están detenidos unos 15; los demás delincuentes de cuello blanco se encuentran sustraídos a la justicia o protegidos y solapados por quienes tienen la responsabilidad de la procuración e impartición de la justicia, que desde luego no es para todos; solo para los que no fueron del equipo de consentidos o que robaron y no repartieron, como se dice, “se fueron lisos”.

Claro, con la elección presidencial y del Congreso de la Unión, la Procuraduría de Justicia de Veracruz ha quedado atada, pues el escándalo de más políticos municipales en la cárcel se traduciría en votos en contra de Enrique Peña Nieto y compañía, como candidatos a senadores y a diputados; en otras palabras, por el momento no conviene echarle más lumbre al fuego, calladitos se ven mejores y eso sirve de remanso o tranquilidad para los ex alcaldes que no fueron detenidos con la euforia de cuando se descubrieron las raterías y desvío de recursos a diestra y siniestra y créanme, ese recurso bien gastado por los ediles no fue para beneficiar al pueblo ni para acabar con la miseria y la marginación de miles de familias.

Endeudar las arcas públicas es un delito, todo sea por la democracia y la justicia social y en nombre de una patria generosa, pues después de todo cuando alguien llega a ocupar una presidencia municipal, la gente, la misma ciudadanía que voto dice: “hasta que le hizo justicia la revolución”, refiriéndose al ganador de una alcaldía, y pues que bien, que todo se haga en nombre de la revolución, pues la historia demuestra que por lo general los alcaldes llegan al poder edilicio para el saqueo. Y en el menor de los casos, para utilizar la presidencia municipal con miras al cargo siguiente; es decir, brincar de un cargo a otro. Utilizan esos cargos como trampolín para pasar a otro, que es lo que les interesa, las necesidades del pueblo no tienen importancia, lo que realmente preocupa es el beneficio personal, de familia y allegados.

Actualmente hay municipios que han solicitado prestamos, entre ellos, Aquila, Atoyac, Carlos A. Carrillo, Cerro Azul, Coacoatzintla, Chiconquiaco, Isla, Jamapa, Saltabarranca y Tlacotalpan, por mencionar algunos, dinero anticipado que fue para ‘’resolver las prestaciones económicas de fin de año con los trabajadores municipales y otras obligaciones financieras’’. Es decir, el alcalde en funciones recibió de su antecesor un municipio saqueado y quebrado, y ni modo, resulta fácil anticipar las participaciones federales para cubrir pendientes básicos, de primaria, como es, y por ejemplo, el aguinaldo…Por hoy es todo, soy Luis González Romero, mi correo electrónico: notiluis@hotmail.com, hasta pronto.

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