Nada se sabe del alcalde
de
Gutiérrez Zamora
Redacción.- Existe
incertidumbre entre los habitantes del municipio de Gutiérrez Zamora porque de
manera por demás extraña, al presidente municipal Jaime Humberto Pérez Bernabé,
no se le encuentra por ningún lado, desconociéndose su paradero, de acuerdo a
los informes de la gente que lo busca, sobre todo los ciudadanos que van a la
presidencia en busca de solución a sus problemas en la ciudad, así como en las
comunidades rurales.
Los preocupados son
los acreedores del ayuntamiento, que por más vueltas que dan por el palacio
municipal no logran localizar el presidente municipal, situación inquietante y
que deja al aire diversas interrogantes, sobre todo existe el temor de que algo
extraño le haya ocurrido, ya que su ausencia no es común en un mandatario
municipal, que cuando mucho sólo viajan a la ciudad de Xalapa, pero el mismo
día o al siguiente están de regreso.
La ausencia del
presidente municipal de Gutiérrez Zamora comentó a notarse desde principios de
año, y sobre ello existen diversos rumores; primero en el sentido de que andaba
buscando la candidatura para la diputación federal por el distrito de Papantla,
después se ha dicho que se encuentra enfermo y otros que se encuentra fuera del
municipio para realizar algunas gestiones, lo cierto que hay muchas dudas acres
comentarios sobre el ausentismo del alcalde de ese lugar.
No han faltado los
bromistas que dicen que se encuentra en viaje de placer, pero lo cierto es que
existe un vacío de poder y los demás ediles no pueden resolver los problemas
planteados por la ciudadanía, en tanto que los acreedores tampoco han logrado
cobrar sus facturas.
Los representantes
de las organizaciones esperan que las autoridades que les compete investigar
rindan un informe sobre el paradero del presidente municipal Jaime Humberto
Pérez Bernabé, del que se supo, más recientemente, fue de que se retiraba de la
lucha por la candidatura para diputado federal.
Pero el asunto va más
allá, dijo, pues cuando alguien que tiene algunas nociones de alguno de los
oficios que supuestamente se imparten, quiere un documento que lo avale, en el
CECATI se lo venden, “como si estuviéramos en Santo Domingo”, en donde hay
títulos de todo y para quien tenga dinero para comprarlos.
Comenta que lo maestros
de los desvencijados talleres están felices porque no trabajan y tienen segura
su quincena, mientras que el director sigue haciendo su negocio, pues incluso
algunos trabajadores del ayuntamiento han logrado comprar sus certificados con
los que avalan sus conocimientos.
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