jueves, 12 de marzo de 2009

PUNTO Y COMA

Punto y Coma

La felicidad es muy compleja
Formas de egoísmo y tolerancia
Cuando la felicidad desaparece

Por Luis González Romero

Angela Gama es una amiga psicóloga de la ciudad de México y le agradezco en envío de material de mucho contenido, mismo que me permito compartir con todos ustedes y en ésta ocasión nos habla de la felicidad, empezando con la interrogante, ¿Qué es la felicidad? Según el Diccionario Enciclopédico, la felicidad es un estado de ánimo que se complace en la posesión de un bien. Satisfacción. Contento.

De acuerdo con Jorge Bucay en su libro El Camino a la Felicidad, menciona lo siguiente: “la felicidad como estado no existe, a lo sumo existen momentos felices. “Yo me acuerdo cuando nació mi hijo; en ese momento era absolutamente feliz, pero después cuando me presentaron la cuenta de dos días en el hospital, la felicidad desapareció.”

Para la Neuropsicóloga Raquel Chayo, “la felicidad es el equilibrio en las diferentes facetas de la vida del ser humano.”, en lo que seguramente usted estará de acuerdo.

Azalea Montoya, Psicoterapeuta Gestalt, señala: “la felicidad es un estado de ánimo interno. Es una construcción de cada individuo que va a depender de los valores subyacentes. Es un estado en el que uno tiene el poder de crearse las realidades internas que uno quiere, todo depende de qué quiero.”

Agrega que “La felicidad es un estado transitorio, es un estado de plenitud. Creo que se está feliz, no se es, porque si no, estaríamos favoreciendo la idea de que la felicidad es permanente, y en mi opinión creo que no es así”, comenta el escritor Alberto Chimal.

José Antonio Muciño, profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, apunta: “la felicidad es compleja, no es comer nada más 3 veces al día, comprar el último aparato electrónico, o saber manejar una computadora muy sofisticada.

La felicidad la confundimos con formas de egoísmo e intolerancia. La felicidad implica no sólo aquello que puede producirnos algo agradable, el que quiere felicidad debe ampliarse al vivir humano en todos sus aspectos, el hombre debe ser consciente de su plenitud, por ejemplo de que va a morir y de que es parte de un proceso natural.

Esto debe de formar parte de las reflexiones que nos llevan a la felicidad. Pensar en la muerte, dolor, sufrimiento, es como aceptar dentro de la vida humana elementos que nos son desagradables y que consideramos nos hacen infelices.”

Pero las opiniones se dividen y para Miguel Ángel de León, Psicólogo y Psicoanalista, la felicidad es un estado de ánimo en que la persona logra desarrollarse plenamente en las diferentes áreas: social, laboral, emocional, sexual y espiritual. Todas éstas en conjunto nos dan la posibilidad de encontrar un equilibrio que nos permite gozar la vida cotidiana.
En la siguiente interrogante, ¿Con qué se asocia a la felicidad y por qué?, La felicidad puede relacionarse con dinero, belleza, amor, éxito, entre otras cosas trascendentes o intrascendentes, a lo que mucho confundimos con la felicidad.

Alberto Constante, Doctor en Filosofía, comenta: “muchas veces nos olvidamos del ser y anteponemos el tener, que si bien esto no es un impedimento para ser felices, lo que pasa es que hemos ajustado nuestra vida exclusivamente al tener; es decir, si yo tengo dinero, posición o soy de ojos verdes, estoy dentro de ciertos parámetros sociales de lo que sería la felicidad.

En México es muy claro que está prohibido ser viejo, moreno, chaparro, gordo, calvo, etcétera, históricamente hemos ido perdiendo nuestra capacidad de ser felices para ajustarnos a pequeñas seguridades miserables. Esto es una falsa felicidad, pero es la que tenemos porque lo demás generalmente ya no nos importa”.

Gama también nos cita a Liz Hamui, Socióloga de la religión, que opina que el dinero puede afectarnos en la medida en que lo veamos como nuestro único medio para llegar a la felicidad; sin embargo, aún cuando nuestra meta sea ganar muy bien y tener un buen coche, mientras haya todo un trabajo que sustente esa meta, un aprendizaje, esfuerzo y una disciplina que le dé sentido a la vida, entonces el asunto cambia, existe un equilibrio.”
Entre algunos obstáculos para la felicidad encontramos: “El principal obstáculo es uno mismo, ése es el enemigo a vencer”, dice Miguel Ángel Gandarela, especialista en Desarrollo Humano.

Para Montoya, quizá el primer obstáculo es que se piensa que la felicidad está afuera, es decir, no se busca ser feliz, sino que nos hagan felices.
Bucay, por su parte, señala que se cree que los conflictos y dificultades que se nos presentan a lo largo de la vida significan pérdida de la felicidad. Esto puede deberse al concepto que uno tiene acerca de ésta, es decir, cuando a la felicidad se le identifica con cero dificultades, cero conflictos y cero frustración.”

¿Por qué sufrimos?, porque el tamaño de la realidad no cabe en el tamaño ni en la idea que uno tiene de la felicidad. A esto agrega de León que el deseo hacia algo por lo regular no concuerda con las posibilidades reales de conseguirlo, y cuando nos aferramos, frecuentemente se activan mecanismos psicológicos que nos llevan a devaluar o idealizar cosas y en ese momento uno empieza a sufrir”.

“Probablemente las personas que están más cerca de la felicidad son aquéllas que más profundamente reflexionan acerca de sí mismos y las que comprenden mejor su propio proceso de búsqueda”, dice Alberto Chimal.

“Cada uno tiene su propio campo de concentración... como seres humanos que somos, debemos afrontarlo con perdón y paciencia”, dice Víctor Frankl y nosotros le decimos gracias Angela, gracias a ustedes que han compartido estas reflexiones que encierran un contenido importante y por lo misma cada quien se pone la corona que se labra….Por hoy es todo, soy Luis González Romero, mi correo electrónico: notiluis@hotmail.com, hasta pronto y pásenla bien aunque no sean felices.

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