viernes, 21 de noviembre de 2008

ALFIL

ALFIL
Renuncias
Por Roberto Piñón Olivas
¿La destitución de los responsables en materia de seguridad pública regresará la tranquilidad a los chihuahuenses, en particular, o a los mexicanos, en lo general?
Creo que no.
El problema, es que la exasperación, genuina en algunos casos, y en otros con un claro móvil político-electoral, lleva continuamente a la exigencia de “oxigenar” los cuerpos policíacos en el orden estatal y federal.
En el caso de Chihuahua, la propuesta de la oposición es destituir a la procuradora Patricia González, y en el federal, dar igual destino a Genaro García Luna y Eduardo Medina Mora, el primero en funciones de secretario de seguridad pública, y el segundo, procurador general de la república.
Las razones son simples: No se aprecian avances en los multimencionados operativos especiales para combatir el crimen organizado; al contrario, los decesos se cuentan por millares: nada menos en chihuahua la estadística habla de más de dos mil ejecuciones en lo que va del año, acumulándose, con tres más en esta capital las últimas veinticuatro horas y otros tantos en ciudad Juárez.
Pero además, la violencia ha trascendido una simple lucha entre bandas rivales, la sociedad vive atemorizada por los secuestros y la nueva modalidad, la exigencia de pagos como modernas alcabalas para poder funcionar.
Para resolver estos problemas no se debe acudir al expediente fácil de destituir funcionarios, debe pensarse en la estructuración de procedimientos eficientes y sobre todo, del fortalecimiento del valor honestidad, como única respuesta al antivalor corrupción.
Los procedimientos permiten su evaluación permanente, y con ello, encontrar elementos suficientes para sancionar, no solo con la destitución, sino con la cárcel, a los malos o ineficientes funcionarios. El tema es impunidad y corrupción.
La única excepción para destituir a un funcionario debe basarse en dicho análisis, donde existan elementos claros de impunidad y corrupción; por ello, corresponde a los legisladores construir ese marco jurídico para dotar al ejecutivo, federal y estatal, de los procedimientos estrictos.
La evaluación de dichos procedimientos debe ser tarea de un cuerpo especializado, que puede ser mixto, interinstitucional: especialistas en materia de seguridad del sector privado, legisladores e incluso, miembros del poder judicial, y por que no, integrantes de entidades federativas, como ingrediente del aspecto federalismo.
Una comisión que evalúe la actuación de servidores públicos y el funcionamiento de los cuerpos de policía, donde los ejecutivos carezcan de un completo control, con una representatividad razonable.
Esquemas como estos deben implementarse en un sistema como el nuestro que aspira a un perfeccionamiento del estado de derecho y el ejercicio democrático del poder, con adecuados contrapesos, y ajeno, sobre todo, a las veleidades de la coyuntura partidista que tanto daño le ha hecho a México. No se trata de crear estructura burocrática por crearla, sino de configurar un adecuado sistema de evaluación distinto al actual, que ha demostrado su innegable ineficiencia.
EN EL TABLERO…Alfonso Gaitán Soto, integrante distinguido del Consejo Directivo de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, se ha echado a cuestas una nueva tarea, al iniciar un nuevo medio de comunicación cibernético…Se denomina “Que viva Durango”, y tiene como dirección www.quevivadurango.com, bajo la frase “aquí estamos todos…”…Felicidades al estimado colega en su faceta de foto-periodismo en la red mundial…
El autor es Presidente del Consejo Directivo de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos A.C. Envíe sus comentarios al correo robertopinon@yahoo.com.mx. www.observador.com Escuche en Vivo en el 1470 AM Radio Formula en el Distrito Federal a las 20:00, en el 1010 AM Radio Lobo en Chihuahua a las 14:00, en cualquier punto de la república y el mundo en www.laequis.com.mx; Autorizada la reproducción total o parcial de la columna Alfil, con mención del autor. Todos los derechos reservado

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