lunes, 18 de enero de 2010
FLUYE MAS AYUDA PARA HAITI
18/01/10……DONATIVO
FLUYE LA AYUDA PARA HAITI
En el DIF se continúa recibiendo víveres
Por Luis González Romero
Poza Rica, Ver.- En el sistema municipal para el Desarrollo Integral de la familia (DIF) se continúa recibiendo la ayuda que en su oportunidad será enviada a la república de Haití, en donde millones de familias se han quedado sin nada, por lo que los veracruzanos radicados en el municipio, se han solidarizado con las personas que viven el tremendo caos desde del sismo del martes anterior y por lo tanto requieren de una gran cantidad de ayuda.
La presidenta del DIF, Consuelo Valdez de Anaya, dijo que esas instalaciones se habilitaron como centro de acopio para ayudar a las víctimas del terremoto en Haití, por lo que durante el fin de semana se recibió una aportación generosa por parte de una compañía, así como los donativos consistentes en víveres, agua y medicinas de la ciudadanía.
Logrando en total reunir un cargamento que será entregado a DIF Estatal en el Parque Temático “Takilhsúkutl”, de los víveres recibidos en las instalaciones del DIF, ubicadas en avenida Juárez, en donde se recibieron diversos productos, tales como agua embotellada, atún, galletas Marías, barra de fibra, alimento para bebé, arroz, frijol, lentejas, azúcar, verdura enlatada, frijol en lata, sardina, aceite, pasta para sopas, jugos enlatados, leche líquida, leche en polvo y café soluble.
También hubo donativos de material de curación; como cubre bocas, algodón, agua oxigenada, guantes, jeringas, isodine, venda elástica, amoxicilina; asimismo productos de higiene como jabón, papel de baño, gel antibacterial, crema y cepillo dental, cloro, toallas sanitarias, pañales desechables.
Este organismo asistencial seguirá recibiendo donativos en especie, a toda hora, para ser enviados por DIF Estatal a la población en desgracia de Haití, en donde apenas se comienza a hacer una evaluación de tantas necesidades.
La Presidenta del DIF, Consuelo Valdez de Anaya exhorta a la población a solidarizarse con personas que además de que normalmente viven en condiciones de extrema pobreza, ahora se encuentran seriamente damnificados por el sismo.
Una vez más la generosidad del pueblo pozarricense queda manifiesta al entregar donativos para llevar ayuda a quienes se encuentra en desgracia, en la lejana isla caribeña; pero esa generosidad y solidaridad se ha logrado capitalizar siempre, de la misma manera como también se ha recibido, como ocurrió después del 11 de octubre de 1999, cuando Poza Rica sufrió fuerte devastación por una tormenta.
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