Poza Rica, Ver.- El Presidente municipal, Pablo Anaya Rivera, exhorta a los introductores de productos cárnicos, a realizar los procedimientos correspondientes en cuanto al sacrificio y transportación de especies animales, ya que de no contar con el sello del rastro municipal, sus productos les serán asegurados y además se les impondrá una multa de hasta 50 salarios mínimos.
A través de la Regiduría comisionada en Sanidad, a cargo de Francisco Xavier López Atzin, a partir del primer lunes de marzo de este año, se implementó un operativo que consiste en la revisión de vehículos repartidores de productos cárnicos, con el fin de asegurarse de que tengan el manejo higiénico adecuado en cuanto a su transportación, independientemente de que presenten los sellos que garanticen el sacrificio efectuado en el rastro municipal y que además avala las condiciones de consumo.
La mañana del miércoles fue interceptada una camioneta pick up Nissan, conducida por Juan Carlos Tolentino, quien transportaba 38 pollos en canal.
El vehículo antes había sido observado por supervisores del Ayuntamiento mientras realizaba entregas en el mercado Manuel Ávila Camacho, al solicitarle la papeleta, comprobante del pago de impuesto al municipio, este se dio a la fuga, y fue en la calle 25 de enero de la colonia la Ceiba donde lo detuvieron.
Al hacerle la revisión, las aves no presentaban el sello de aprobación por parte del rastro municipal, por lo que fue trasladado a la regiduría donde se le aplicó una multa de 45 salarios mínimos, equivalente a un aproximado de 2 mil 512 pesos con 80 centavos; según el conductor el propietario de estos pollos se hace llamar Alfredo Nava Acosta y estos animales son provenientes del municipio vecino de Tihuatlán.
“Según el artículo 46 del reglamento -de sanidad-, el sacrificio de animales que no se realice en el rastro se concederá clandestino y las carnes y sus productos serán decomisados y sometidos a inspección sanitaria por parte de la autoridad municipal, el lugar será clausurado y se hará acreedor a una multa desde 50 a 500 salarios mínimos, cuando sea un rastro clandestino” concretó Jesús Ocaña Reyes auxiliar de la regiduría comisionada en sanidad.
Después de haber decomisado algún producto cárnico u otro que sea de consumo humano luego de no haber cubierto el pago de la sanción calificada, en base en el reglamento –de sanidad- el Regidor está facultado para determinar el fin del producto, cediéndolo a Instituciones como el DIF, el asilo de ancianos, la casa de la luna o el CERESO, señaló así Jesús Ocaña Reyes, agregó que si los locatarios son sorprendidos con la venta de los productos antes mencionados se les aplicará la infracción, aunque no sean introductores.
“Camionetas que sean sorprendidas, locales o expendios, que no tengan el sello, ya sea puerco, res o pollo, se hacen acreedores a una infracción” indicó Ocaña Reyes, dando a conocer también que el rastro municipal cobra 70 centavos por el impuesto de cada ave y los matanceros cobran un peso con 30 centavos, haciendo un total de 2 pesos, sin embargo los introductores por ahorrarse un poco de dinero, prefieren trabajar de forma clandestina, ya que si matan cien aves, se ahorran 200 pesos pero hay quienes matan desde mil a cuatro mil diariamente, de esta manera evaden pagar el impuesto correspondiente al municipio.
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