Productores de maíz victimas del “coyotaje”
Les pagan solo 10 pesos por el kilo de hoja
Por Luis González Romero
Poza Rica, Ver.- Los productores de hoja de maíz son víctimas de una red nacional de “coyotes” que solamente les pagan 10 pesos por el kilo de hoja ya empaquetada, pero dada la necesidad de los ejidatarios tienen que realizar el proceso correspondiente de cortar la hoja, empacarla y después entregarla a los compradores que en la zona se desplazan en flamantes camionetas en las que transportan el producto a la bodegas.
Lo anterior está ocurriendo en municipios en donde todavía hay grandes extensiones de tierras ejidales y pequeñas propiedades dedicadas al cultivo de maíz, como Cazones, Espinal, Papantla, Coyutla, Gutiérrez Zamora, Tepetzintla, Tihuatlán, Castillo de Teayo y Tecolutla, entre otros lugares del norte de la entidad, en donde se aprovecha el grano y el subproducto, la hoja.
Casimiro San Martín Simbrón, Agente Municipal de la congregación “Gildardo Muñoz”, perteneciente al municipio de Papantla, manifestó que los compradores de la hoja de maíz tienen bodegas en El Chote, en La Concha, del municipio de Tihuatlán y otros lugares.
Cuando esas bodegas están repletas, cargan camiones o tráileres que la transportan a San Luis Potosí “en donde están los meros patrones”, dijo Casimiro, añadiendo que en otras años les han pagado un poco mejor, pero que en esta vez solo les dan 10 pesos por kilogramo de hoja.
Una parcela de 10 hectáreas cultivadas de maíz produce un promedio de 2.5 toneladas de hoja, la cual es desprendida de la mazorca con una sierra filosa que en forma de aro se utiliza para separar la hoja que luego pasa a formar parte de las pacas que son compradas por los “coyotes”, que son empleados, pero que sus patrones son los que se llevan la mejor tajada en este negocio.
Desde las bodegas que se localizan en San Luis Potosí, la hoja de maíz se envía a Estados Unidos, Canadá y algunos países europeos, en donde no precisamente se utilizar para envolver tamales –como en México- sino que la industrializan y de la misma obtienen diversos subproductos, incluyendo de ornato que se venden caros en dólares o euros.
La hoja de maíz se convierte en un gran negocio con mercado internacional, dijo la señora Teresa de San Martín, en tanto que los ejidatarios siguen viviendo en la pobreza, porque además el poco dinero que reciben por la producción de hoja, lo aplican para la compra de fertilizantes y el proceso de la tierra para la siguiente siembra, con esperanzas de que les vaya mejor.
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