08/02/09…….curso

REHABILITACION FISICA EN ADULTOS MAYORES

A petición de la presidenta del DIF

Por Luis González Romero

Poza Rica, Ver.- Personal del DIF asignado a los albergues tanto de niños, niñas y adultos mayores, recibieron un curso teórico-práctico sobre la rehabilitación física en adultos mayores, con la finalidad de dar una mejor atención a los habitantes de la Casa de los Abuelos.

Al mencionado curso también acudieron las colaboradoras de Casa del Sol y Casa de la Luna, con la finalidad de tener los conocimientos elementales para atender a las personas, tanto adultos como menores en condiciones vulnerables.

La presentación estuvo a cargo de la coordinadora de albergues Laura Ramírez Carranza, explicando que el curso-taller surgió a petición de la presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Consuelo Valdez de Anaya, para que las colaboradoras de los tres albergues tengan conocimiento de las terapias, ejercicios y masajes utilizados por la terapeuta de la Unidad Básica de Rehabilitación del DIF, Magdalena Valdez Barjau, y ponerlos en práctica cuando así se requiera.

Iniciaron las ponencias con la participación de la Dra. Rosa Amelia Muñoz Bermúdez, de la Unidad Básica de Rehabilitación del DIF, quien hizo una introducción al tema mediante la proyección de dispositivas, explicando las generalidades de los cuidados que se deben tener con el adulto mayor.

Resaltó la importancia de la actividad física, que a la edad avanzada podría ser una caminata tranquila; así también comentó que como seres humanos con el paso del tiempo se padecen diversas enfermedades, llamadas crónico-degenerativas, como la hipertensión o diabetes, o el deterioro de articulaciones y funciones y que esto es considerado normal.

Debido a esa situación aparecen cuadros depresivos y alteraciones generales; como ejemplo citó que al ser la única persona de edad avanzada en la familia, se torna callada y retraída, ya que no puede establecer temas de conversación de su interés con alguien más y esto lo aísla automáticamente de los demás.

Por su parte el terapeuta físico Osvaldo Hernández, de la Unidad de Rehabilitación, habló de la higiene en los adultos mayores y los cuidados y precaución que deben tomar en cuenta con su boca, piel, cabello, uñas, deambulación, uso correcto bastón y prevención de accidentes o caídas; revisión del calzado adecuado y aseo personal para evitar infecciones.

La Terapeuta Física Magdalena Valdez Barjau, de la unidad Básica de Rehabilitación hizo una demostración de un masaje a un anciano del albergue, en un proceso lento para detallar la explicación a las asistentes, comentó que los masajes son una práctica física que data de 3 mil años antes de Cristo con utilidad relajante, curativa y de eliminación de toxinas, siendo 15 minutos por miembro o extremidad y 45 minutos por un masaje total el tiempo ideal para el organismo, recomendando masajes constantes en el estómago, así como el consumo de verduras, frutas, fibra y agua para favorecer su digestión.

“La piel de los ancianos es más frágil” y hay que tener precaución para tratarla, de preferencia con aceites vegetales, que son los que absorbe el cuerpo con más facilidad y no tapan los poros”, aseguró.

Para la enfermera María Consuelo Valdez de Anaya, los adultos mayores son seres dignos de respeto y admiración, que merecen cuidados y una vida digna, por eso la preocupación de dar estos talleres y contar con una preparación integral que atienda sus necesidades al cien por ciento.

“Lo más importante –dijo- es atender al paciente con visión preventiva, cuidar que no suceda algo imprevisto, como una caída que empeore su situación, así como saber identificar los diferentes padecimientos y las medidas preventivas para proteger su integridad física”. Puntualizó la señora Consuelo Valdez de Anaya.