jueves, 18 de agosto de 2011

FRACCIONAMIENTOS DE LUHO CON CALLES DESTROZADAS


Fraccionamientos de lujo con calles destrozadas

No se les proporciona mantenimiento

Por Luis González Romero

Poza Rica, Ver.- En esta ciudad de contrastes, hay miles de familia que viven en extrema pobreza, en condiciones infrahumanas, con calles intransitables y viviendas de miseria; pero también existen fraccionamientos, con residencias de lujo y de elevado costo, pero desgraciadamente con calles destrozadas, a las que los propietarios de esas casas no les proporcionan mantenimiento durante muchos años.

Uno de esos lugares son los fraccionamientos Buenavista I y II, ubicado enfrente de la Parcela 14, concretamente en la calle “Expropiación Petrolera”, en donde la carpeta de concreto se ha fractura, en partes ha desaparecido, formándose enormes baches que hacen casi imposible el paso de vehículos e incluso representa un riesgo para los peatones, en particular para los niños que todos los días transitan por ese lugar cuando se dirigen a la escuela.

Los transportistas, al igual que las familias, se ven obligados a recorrer el camino que está en deplorables condiciones, y desde hace varios años, “no tiene arreglo”, lo que resulta preocupante y mientras los vecinos se quejan de ello, pero se cruzan de brazos y no hacen nada por resolver el problema.

Rubén Acosta Lagarde, que todos los días transita por esa avenida para distribuir material de construcción en las colonias colindantes, comentó que el acceso dificulta la circulación de automóviles, desde particulares hasta de quienes por necesidad de trabajo pasan ahí a pesar de las condiciones desastrosas de las calles.

La calle “Expropiación Petrolera” comunica a familias de las colonias Parcela 14 e Insurgentes, además de los fraccionamientos “Bellavista I y II”, estos dos últimos son habitados en mayoría por trabajadores de Petróleos Mexicanos.

El deterioro se encuentra en un trayecto de aproximadamente 500 metros, en donde se han formado grandes baches, que en algunas ocasiones los han rellenado con tierra; pero llega la lluvia y vuelven a quedar peor que antes.

Además existen fugas de agua, lo que ocasiona que el pavimento se deteriora con mayor rapidez, así como el desprendimiento del pavimento, quizá por la mala calidad del mismo o por el constante paso de unidades pesadas de Pemex, autobuses de pasajeros y camiones materialistas.

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