CRONICA INTIMA

Crónica Intima

VIGENTE, LA LEY JUÁREZ, Y
LA VOZ INMORTAL DEL POETA

Por Othón Villela Larralde*

La decisión de la Suprema Corte de Justicia de que los miltares que ataquen o violen los Derechos Humanos sean juzgados por Tribunales Civiles, tiene antecedente directo en la Ley que dictó el Licenciado Benito Juárez hace 155 años, en octubre de 1856, al triunfo de la Revolución de Ayutla, para eliminar uno de los problemas de justicia más grandes que sufría México, el de los Fueros Militar y Eclesiástico, en que los individuos de esos sectores podían hacer lo que les viniera en gana sin que nadie los llamara a cuentas. Por ello fue que la bandería de los conservadores en los años siguientes era la de: "Religión y Fueros".

Otra vez, la lección de la historia está presente implacable e insoslayable, pero tiene más peso actualmente porque el lunes próximo se cumplirán 139 años de la desparición física del paradigma de los mexicanos: el Indio de Guelatao, cuya lección está más vigente que nunca, con apego a las leyes y al Derecho, y quien pronto regresará a Los Pinos, de donde lo sacó, en imagen, el año 2000, el rinconero Vicente Fox, esto por lo de su tierra San Pancho del Rincón.

En España, casualmente, se promulgó estos días la Nueva Ley para Militares, con la sencilla definición de que "los soldados son Ciudadanos antes de ser miembros del Ejército".

Nadie puede discutir la heroica y noble misión de los miembros de nuestro ejército en la lucha contra el narcotráfico y la criminalidad organizada, pero no se puede negar tammpoco que algunos de sus miembros han abusado de sus funciones en perjuicio de ciudadanos inermes, y que son ciudadanos sujetos a las leyes civiles, sin fuero especial.

Por otra parte, duele en todo el mundo de habla hispana la muerte injusta de Facundo Cabral, un cantor que a nadie nunca, jamás, hizo ni deseó el mal. Un antecesor suyo, el inmortal payador argentino Santos Vega, murió de manera misteriosa hace unos 140 años, después de haberse enfrentado, guitarra con guitarra y bajo un ombú, al mismo diablo vestido de payador, y su paisano, el poeta Rafael Obligado, le dedicó estas líneas que bien pueden quedar para Facundo:

"Cuando la tarde se inclina sollozando al occidente
corre una sombra doliente sobre la pampa argentina.
Y cuando el sol ilumina con luz brillante y serena
del amplio campo la escena, la melancólica sombra
huye besando la alfombra con el afán de la pena.

Cuentan los criollos del suelo. si su guitarra algún mozo
en el crucero de un pozo deja de intento colgada,
llega la sombra callada y al envolverla en su manto
suena el preludio de un canto sobre las cuerdas dormidas,
cuerdas que vibran heridas como por gotas de llanto..."

¡Ay Facundo... Señor y Cantor del mundo, sereno, alegre y sencillo constructor de frases y melodías de nuestras cosas cotidianas, croniquero y payador, improvisas en el cielo con guitarra que seguramente te da Dios, también cumpliste el destino que te marcó tu vida y tu voz resuena en todos los ámbitos de nuestra patria grande, por encima del crimen, del vicio, de lo malo, de la angustia y de lo perverso.

Ahora inicias el vuelo permanente de los inmortales, Facundo Cabral querido, en tu Bien Cantar y tu "Bien Decir... para el Bien Hacer".

Periodista, Historiador y Poeta. othon.villela.l@gmail.com