Punto y Coma
Se busca identidad para Poza Rica
De campo petrolero a gran ciudad
El turismo como nuevo potencial
Por Luis González Romero
El campo petrolero que se descubrió a principios del siglo pasado se convirtió en la novedad para la región y el país. Antes ya lo era Ébano, San Luis Potosí; después en la zona de Mata Redonda, al norte de Veracruz y más después en Poza Rica, en la zona de Furberos y en Cobos, municipio de Tuxpan y años después, allá por 1908, construyeron la vía de “la maquinita” que hacía el recorrido entre los dos puntos, transportando a los trabajadores y dando un nuevo rumbo a la región y llamando la atención a gente de todo el país, por lo que comenzaron a llegar hombres y también mujeres de Michoacán, San Luis Potosí, Hidalgo, Morelos, Tamaulipas, Puebla, Estado de México, Distrito Federal, Jalisco, entre otras entidades; incluso llegaron personas procedentes de China, Japón, Italia, Alemania, Estados Unidos y hasta argentinos.
Los hombres llegaron con la intención de trabajar para las compañías extranjeras que eran las dueñas del petróleo y que además explotaban a los obreros y cometían muchas tropelías en contra de la gente, así como destrozos del medio ambiente, como se puede ver en la película La Rosa Blanca, en donde se aprecia como los representantes de esa empresas transnacionales eran capaces de todo con tal de conseguir sus objetivos, como la extracción del petróleo.
Muchos de los hombres que llegaron a esta zona, hoy Poza Rica, pero que en esos tiempos pertenecía al municipio de Coatzintla, no pudieron acomodarse como trabajadores petroleros y optaron por realizar otras actividades, como abrir taquerías, cantinas y todo tipo de negocios; en tanto que las mujeres atraídas por el auge del petróleo y de la derrama económica, entraron a trabajar en las cantinas (hoy antros), ejercieron la prostitución y algunas damas más abusadas abrieron sus propios negocios, sus cabaretuchos de mala muerte y mala suerte, como el que estuvo en lo que hoy es colonia López Mateos, en Coatzintla, en donde había muchas cantinuchas y los espacios para el baile, la diversión y hasta para las relaciones sexuales, que era la actividad más socorrida.
En esos lugares se gastaban su dinero los trabajadores petroleros de aquellos tiempos, cuando ni siquiera soñaban en tener un sindicato de petroleros. Pero había de todo y para todos, pues en lo que hoy se le conoce como Curva Marina, en aquellos tiempos de oro negro, vicio y prostitución, una mujer de nombre Marina abrió una “casa de citas”, a la que acudían las chicas más recatadas, pero finalmente acudían a esa casa a esperar a los hombres que contrataran sus servicios sexuales. Desde luego que Marina hacía su negocio, porque lo mismo vendía cerveza, vinos y obtenía ganancias de las chicas, a las que les cobraba por la estancia y la oferta de sus servicios. Todo eso se acabó, pero el lugar se continúa llamando “Curva Marina” y hasta de manera oficial cuando se levanta un reporte por accidente, se asienta que ocurrió en la Curva Marina de la carretera Poza Rica-Coatzintla.
Otro ejemplo que relata la historia es que en la calle Chapultepec, también se establecieron cantinas y lo que ya para entonces le llamaron zona de tolerancia, la cual fue reubicada a petición de las señoras de “la vela perpetua”, a la colonia Reforma, salida a Cazones, casi en despoblado hace 34 años. En la misma avenida Chapultepec se encontraban el viejo cementerio de la colonia Manuel Avila Camacho, lugar que hoy ocupa el Parque Fundadores; en tanto que a la altura del monumento a Los Caídos, sobre el bulevar Adolfo Ruiz Cortínez, había una cantina denominada “Balsaminas” y hasta la fecha hay pasajeros que le piden al taxista que los deje en Balsaminas. Otros piden que los dejen frente a Los Caídos; pero aún hay alguno queotro que pide los bajen en la esquina de Ruiz Soladrero (después Ruiz del Valle), negociaciones que ya no existen. Nombres que se quedaron para siempre y que forma parte de la historia de esta gran ciudad que surgió de un campo petrolero hace más de un siglo, con una serie de irregularidades urbanas que en la actualidad se busca corregir, sobre todo en el rubro de saneamiento, por el que ahora lucha el gobierno municipal que coordina Alfredo Gándara Andrade, que quiere al pueblo que lo vio nacer y que él trabaja para darle una nueva imagen, desde el centro hasta las colonias de la periferia…Por hoy es todo, soy Luis González Romero, mi correo electrónico: notiluis@hotmail.com, hasta pronto y buen inicio de semana.
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