El Presidente ruso llegó con un retraso de unos 40 minutos a la audiencia privada con el Pontífice; entre los temas a tratar destacan la crisis en Siria y la inestabilidad en toda la región de Medio Oriente

Putin buscó con interés reunirse con el líder católico para aprovechar la cumbre bilateral Rusia-Italia, que comenzará este martes 26 en la norteña ciudad italiana de Trieste.
Aunque se trata de un horario inusual para una audiencia del Papa con un jefe de Estado, ya en el 2007 el Papa Benedicto XVI lo había recibido en horas de la tarde. También estuvo con Juan Pablo II en 2000 y 2003.
La delegación rusa está compuesta por varios ministros, entre ellos el de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, y el de Defensa, Anatoly Antonov.
Entre los temas de convergencia entre Putin y el Papa Francisco destaca la preocupación por la crisis en Siria y la inestabilidad en toda la región de Medio Oriente.
Tras dialogar con el obispo de Roma, el mandatario también sostendrá un encuentro privado con el "número dos" del Vaticano, el secretario de Estado Pietro Parolin
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