LOS PROYECTOS PRODUCTIVOS DE LA SRA ESTÁN CAMBIANDO LA VIDA
EN LAS COMUNIDADES RURALES: EUFROSINA CRUZ
La maestra indígena se reunió con el secretario Abelardo Escobar Prieto, a quien señaló que ha habido un cambio en la mentalidad de la gente
El titular de la SRA manifestó su beneplácito porque organismos internacionales, como la FAO, dan buena calificación a los proyectos productivos
La representante indígena Eufrosina Cruz Mendoza afirmó que los proyectos productivos que impulsa la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) a través de los programas de la Mujer en el Sector Agrario (Promusag), del Fondo para el Apoyo a Proyectos Productivos en Núcleos Agrarios (Fappa), del Fomento al Desarrollo Agrario (Formar) y del Joven Emprendedor Rural y Fondo de Tierras, le están cambiando la vida a las comunidades de Oaxaca, particularmente en su comunidad, Santa María Quiegolani.
Eufrosina Cruz, quien fue discriminada por ser mujer y no se le permitió asumir la presidencia municipal en su comunidad, se reunió con el secretario de la Reforma Agraria, Abelardo Escobar Prieto, y dijo que ahora hombres y mujeres trabajan de común acuerdo en varias comunidades de Oaxaca: unos tienen panaderías, otros farmacias, gallinas, puercos o ganado de engorda, y tienen para comer, pero lo mejor es que están cambiando su mentalidad.
La dirigente de la agrupación Queremos unir, integrando por la equidad y género a Oaxaca (Quiego), explicó a Escobar Prieto que recientemente acudieron a su comunidad funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), y les gustó la forma en que están operando los programas de la SRA, además de que ofrecieron estar más cerca de las comunidades para apoyarlas.
Me preguntaban que tan importante es el programa para las comunidades. Les dije que para nosotros es definitivo, ha transformado el entorno. Quizá el recurso es importante, pero transformar la mentalidad de toda una comunidad para atacar el paternalismo y el caciquismo, eso es lo más importante, señaló.
El secretario de la Reforma Agraria, Abelardo Escobar Prieto, manifestó su beneplácito porque importantes organismos internacionales han calificado muy bien los proyectos productivos como el Promusag e indicó que quienes están siendo beneficiados deben convencer a otros en su comunidad para organizarse en torno a proyectos productivos que les cambien la vida.
Señaló que el dinero que se aporta para los proyectos productivos es un apoyo y que lo sustancial es la actitud, el empeño y la solidaridad que asuman los integrantes del proyecto. El objetivo social de la Secretaría de la Reforma Agraria está inspirado en las ideas de Francisco Villa y Emiliano Zapata por eso estamos más vinculados con los pobres del campo y los indígenas, afirmó Escobar Prieto.
Por su parte, la maestra oaxaqueña, Eufrosina Cruz, dijo que su deseo es que la gente descubra sus capacidades para el desarrollo de la comunidad, de la región, del estado y del país, para ir generando otra cultura, otra visión de igualdad que no existe en las comunidades por el cacicazgo que por años se ha escudado en los usos y costumbres.
No es problema de nuestros usos y costumbres, la clave está en la educación, en la cultura, la concientización, afirmó y para darle más fuerza a su aseveración hizo notar que cuando empezaron a trabajar hace poco más de dos años fue todo un reto reunir hombres, mujeres y jóvenes.
Ahora las cosas son distintas, dijo, se han rebasado las expectativas con más de dos mil personas reunidas en la punta del cerro hablando de derechos humanos, de empoderamiento de las mujeres en las comunidades, vas rompiendo la idea de que las mujeres no tienen derecho a tomar decisiones para el desarrollo de las comunidades.
Nuestros usos y costumbres deben ser combinados con nuevas formas de vida de justicia, de mayor equidad, y nunca más con la violación a los derechos humanos. En esta nueva forma de pensar, de actuar nos ha ayudado el programa Formar en estos dos años que nos han apoyado.
Esas mujeres que nos reuníamos en un cuarto para organizarnos y que nos veían los caciques como si fuéramos delincuentes, esas mujeres les dicen ahora a otras que si se pueden hacer cosas. Ese cuarto ya no alcanza para los hombres y jóvenes que se están sumando, a través de Formar, agregó.
El beneficio con Promusag es evidente: hoy la señora ya tiene sus pollos, ya venden sus marranos fuera de la comunidad, corte y confección, la panadería, la de engorda, sólo hay que ver el rostro de las mujeres, de los esposos cuando llega la mercancía ellos ya apoyan, ayudan a aplanar el terreno, no son las ocho integrantes sino que es la transformación del entorno familiar, no sólo de la mujeres, dijo.
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