PUNTO Y COMA

Punto y Coma

Lo que nos dejó el año viejo.
Huracanes, violencia y más pobreza.
Los buenos deseos, signo de esperanzas.

Por Luis González Romero

Por buenos deseos, palabras alentadoras, abrazos y hasta regalos en algunos casos, son parte de la temporada, en Navidad y con la llegada de un año nuevo con su cargamento de esperanzas y aunque tenga usted que enfrentar a la “cuesta de Enero” y al pago de predial, tenencia y todas las cargas fiscales habidas y por haber, los bueno deseos se hacen presentes aunque solo queden en eso, en buenos deseos de alguien que nos quiere, nos ama y que nos lo dice sinceramente; pero también de aquello que solo lo hacen a manera de “cumplido” durante un encuentro casual o provocado, pero que solo se trata de una sonrisa con careta de hipocresía.

Por lo que respecta a los tres ordenes de gobierno y las dependencias emanadas de los mismos, cada año, cada momento y en todas partes se escuchan oraciones referentes al combate a la pobreza, a la marginación, a la corrupción, a la carestía, a la injusticia pronta y expedida, al respeto a los derechos humanos, a la vida digna y no se a cuantas cosas mas que son el pan y la arenga de cada día de los funcionarios, que de esa manera logran el control de la sociedad débil y agobiada por la falta de empleo y consecuentemente por el hambre.

De acuerdos a las cifras que da a conocer el presidente Felipe Calderón, estas no coinciden con las que proporciona el Instituto Nacional de Estadistas, Geografía e Informática (INEGI); pero los datos que da a conocer el mandatario mexicano se acercan más a la realidad, reconociendo que más del cincuenta por ciento de la población vive en condiciones de pobreza, de marginación, de miseria, de hambre, porque escasea el trabajo y el que existe es mal pagado. Salarios bajos, cero prestaciones y jornadas laborales hasta de 12 horas en condiciones inseguras y otras situaciones que poco o nada dignifican a la clase trabajadora; además de que es motivo de que más de 12 millones de mexicanos se encuentren laborando en el extranjero (Estados Unidos).

Aun con todo eso los mexicanos seguimos adelante y el esfuerzo de todos se manifiesta en todas partes, y logramos salir adelante con la ayuda de empresarios, de programas institucionales, como ha ocurrido en el centro y sur de la entidad veracruzana, luego de los devastadores huracanes que afectaron a miles de personas, familias enteras que se quedaron sin hogar, sin cosechas, sin nada; pero con una voluntad férrea se mantienen de pie y trabajando, superando los efectos de la tragedia y con nuevos bríos para salir adelante y, no se han levantado, porque aseguran que nunca estuvieron caídos.

Hoy es el penúltimo día del año 2010 y prácticamente se cierra una etapa con gran actividad y con nuevas esperanza, a un mes de que Javier Duarte de Ochoa asumió la gubernatura del Estado y a unas horas de que se realice la renovación de los poderes en 212 municipios veracruzanos, a los que llegan gente con intenciones de servir, por lo menos con intenciones; pero que la población es una opción más de encontrar respuesta a sus inquietudes, a sus carencias, tanto en las colonias de las grandes urbes, como en las medianas y pequeñas poblaciones; así como en las comunidades rurales, que son los sectores en donde precisamente se asientan los cinturones de miseria, pobreza y marginación en todos las aspectos.

Si usted es lector de periódicos o escucha los noticiarios en la radio o televisión, seguramente ha escuchado como algunas dependencias federales o estatales reparten miles y miles de millones de pesos en beneficio de los que menos tienen, como es el caso de la Sedesol, Sagarpa, Secretaría de la Reforma Agraria, entre otras, desde donde supuestamente se manejan muchos millones de pesos para combatir la marginación y la pobreza; pero que lamentablemente no se reflejan en la realidad.

Las esperanzas ciudadanas se renuevan cada vez que hay cambio de gobierno, como cada vez que llega la navidad y el año nuevo, dejando atrás el pasado que ya no existe y mirando siempre adelante, con la convicción de ser mejores, de salir de la crisis, de alcanzar mejores niveles de vida para dejar atrás el pasado que ya no existe, porque el presente será siempre que el ayer y por lo tanto viva éste día intensamente, porque el mañana no nos pertenece….Por hoy es todo, soy Luis González Romero, mi correo electrónico: notiluis@hotmail.com, has pronto, FELIZ AÑO y evite los excesos.