UN COCHINERO EL MERCADO POZA RICA

Un cochinero el mercado Poza Rica

Se moja por fuera y por dentro

Por Luis González Romero

Poza Rica, Ver.- El mercado Poza Rica –en el área no remodelada- es un cochinero cuando caen las lluvias, pues se moja por fuera y por dentro se inunda, por lo que la gente tiene que caminar entre charcos, lodo y chorros de agua que se filtra por las enormes gradaciones que tienen los techos de lámina de zinc o de cartón.

Aun en medio de ese charquero, escurrimiento de agua, locatarios mantuvieron abiertos sus locales, adornados por las cascadas que se veían por todas partes y que algunos trataron de contener con baldes que colocaron, supuestamente para retener el agua; pero era demasiado y todo ese sector del mencionado centro de abasto estaba convertido en un cochinero este fin de semana.

La necesidad de comprar artículos que solo en dicho sector del mercado se encuentran, cientos de personas realizaron sus recorridos y algunos en plan de broma decían que el mercado se llama “Venecia”; pero otros fueron más crudos en su expresión, pues señalaron que los pasillos del mercado estaban convertidos en un asco, en cochinero, y la respuesta de los comerciantes fue una sonrisa que más bien parecía gesto resignado, porque siempre pasa lo mismo.

Había señoras, niñas y señores que no querían mojarse los zapatos y le daban vuelta a los charcos, por se atravesaban con donde caían los chorros de agua y como quiera se mojaron.

Claro, todo eso ocurre en los pasillos del mercado, porque en lo que son los locales, los comerciantes buscan la forma de proteger lo mejor posible su mercancía para que no se les eche a perder con la lluvia.

El estado que guarda ese mercado, un centro de abasto que nación antes de que Poza Rica fuera municipio libre, es el reflejo, por un lado de la apatía de los locatarios y por el otro el poco interés de las autoridades para que la ciudad más importante del norte del estado cuente con un mercado de primer nivel, a la altura de las circunstancias.

A las autoridades municipales, cuando les conviene recorren los pasillos del mercado, sobre todo en tiempos de campaña, prometiendo y prometiendo; pero cuando llegan al poder se olvidan de ese lugar y así han pasado un promedio de 20 ayuntamientos y el citado centro de abasto está en peores condiciones, sobre todo el sector no remodelado.