miércoles, 1 de septiembre de 2010
NECESARIA LA AUTOEXPLORACION PARA DETECTAR EL CANCER DE MAMA
NECESARIA LA AUTOEXPLORACIÓN PARA LA DETECCIÓN DEL CÁNCER DE MAMA
No obstante que el cáncer de mama es curable si se detecta a tiempo, es una de las patologías más frecuentes y actualmente ocupa el primer lugar en mortalidad, rebasando al cáncer cérvico uterino; por ello es necesario que las mujeres aprendan a detectarse anomalías en sus senos mediante la autoexploración.
Esta revisión debe hacerse cada mes a partir de los 20 años de edad, y después de los 25 es recomendable una revisión clínica anual. A partir de la cuarta década de vida si se tienen antecedentes familiares, debe practicarse una mastografía una vez al año.
Así lo informaron especialistas del Servicio de Gineco-Oncología del Hospital General de Zona (HGZ) N° 71 “Benito Coquet Lagunes” del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz, quienes recomendaron a la población femenina hacerse una detección de cáncer de mama por mastografía, lo cual forma parte fundamental de los Programas Integrados de Salud.
Con PREVENIMSS se implementó como estrategia realizarlas cada dos años a mujeres entre 50 y 69 años de edad, y entre las de 40 a 49 si tienen antecedentes familiares directos de cáncer de mama (como madre, hermana o hija), ya que el treinta por ciento con estos factores hereditarios podrían padecerlo.
Se indicó que es importante llevar a cabo medidas preventivas como una alimentación baja en grasas, sobre todo las de origen animal (carnes rojas), evitar el consumo de alcohol y hacer ejercicio regularmente.
Entre las causas de esta enfermedad están no haber tenido embarazos; que la primera gestación a término (nueve meses promedio) sea después de los 30 años de edad; no haber amamantado a su(s) hijo(s), haber iniciado la menstruación antes de los 11 años, la menopausia después de los 50 y ser obesas.
Explicaron que la autoexploración clínica de las mamas debe realizarse de preferencia entre el séptimo y el décimo día después de iniciado el ciclo menstrual (periodo en el que están menos sensibles las mamas). La mujer debe observarse con el torso desnudo frente a un espejo, primero colocando las manos sobre la cadera y después con los brazos levantados, para revisar la forma, el tamaño, textura y color de la piel de los senos, y descartar la presencia de hundimientos o desviación del pezón.
Esta revisión se completa con un examen clínico anual a partir de los 25 años de edad, mediante la inspección y la palpación que realizan la enfermera de medicina preventiva, la enfermera materno-infantil o el médico familiar.
Los especialistas médicos recomendaron acudir al médico de inmediato cuando en la exploración se detecte la presencia de una “bolita”, una deformidad, o cambios en el color o rugosidad de la piel, secreción o dolor, ya que puede ser la manifestación de un problema grave.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario